El Tango, desde el interior
En un rincón, muy lejos de Buenos Aires, también danza el tango como una necesidad cultural.
El salón es impecable, los espejos no dejan nada sin mirar y allí, la bailarina enseña los caminos técnicos para que cada uno de los alumnos descubra ese tango que vibra en su interior. Es que el tango está allí, solo hay que saberlo descubrir, con su propia forma, con su propia expresión.
La intrigante danza, nacida en el arrabal porteño, se esparce por todo el territorio argentino. En el sur de Mendoza también vive y se desarrolla con bailarines que se perfeccionan permanentemente. Lo viven apasionadamente y lo difunden con sus talleres para distintos niveles .
Olga Lara nos recibe en su lugar, donde da clases cada sábado, ofreciéndonos una muy interesante charla que nos lleva, en su análisis profundo, a esas fibras que se mueven en la intimidad de un abrazo. Abrazo que sólo puede interpretar el Tango y que tiene posibilidades infinitas en la comunicación con uno mismo y con la ocasional pareja.
El tango expone con rigurosidad una deficiencia cultural de estos tiempos. Hoy queremos todo fácil y rápido. El tango no es el caso, necesita de tiempo para poder disfrutar de su expresión.
Olga Lara
– Profesora elemental de danzas clásicas
– Lic. en Psicopedagogía
– Más de 10 años como bailarina de tango
– Bicampeona sub sede Mendoza del Mundial de Tango Pista
– Cuatro años de docencia con clases regulares de tango en San Rafael (Mza.)
Entrevista y edición: Adrián Eula